En este artículo vamos a ver cómo vencer la timidez para preguntar en clase en la universidad y, además, veremos cuáles son los beneficios de participar en clase.

Primero, debes superar la timidez y el miedo a equivocarte. Luego, debes aprovechar los espacios que el profesor o la profesora dedican a las preguntas. Además, tienes que ser consciente del tiempo y darle la oportunidad de participar a otros. Los beneficios son que ganarás reconocimiento por parte del docente, absorberás mejor los conocimientos y desarrollarás tu capacidad de comunicación.

¿Es necesario participar en clase?

Participar en clase puede parecer innecesario en muchas ocasiones. Más aún en grupos numerosos o en cursos que se aprueban principalmente por nuestro desempeño en las evaluaciones escritas.

Sin embargo, aportar ideas o preguntar dudas puede ayudarnos mucho en diversos aspectos. Pero, comencemos con algo que seguramente te esté limitando a preguntar en clase.

Timidez y miedo a equivocarse

“¿Se entendió?”, pregunta el profesor al terminar una explicación. Nadie dice nada y el docente, ya acostumbrado a esa situación, sigue con otro tema. Esto ocurre todo el tiempo en la escuela primaria, secundaria y también en la universidad.

Está claro que no todos entienden lo que se explicó. Sin embargo, no hay ninguno o son muy pocos (y siempre los mismos) los que participan en clase.

Las razones de esto son generalmente dos: timidez y miedo a equivocarse.

Superar la timidez para preguntar en clase

Con respecto a la timidez, es natural sentirla porque cuando haces una pregunta en el aula, todos te miran y pasas a ser el centro de la escena. Son segundos, pero para quienes no están acostumbrados a ser el centro de la atención, parecen siglos.

Sin embargo, tienes que entender que hablar va a ser parte de tu profesión, sea cual sea. Es decir, que, en algún momento, tendrás que ser el centro de la escena. ¡Qué mejor forma que practicarlo en las clases que vas teniendo en la universidad!

El miedo a equivocarte

El miedo a equivocarse también es natural. Preguntar algo ridículo y que todos se rían te hace quedarte en silencio. Aunque tal vez tengas una duda producida por alguna omisión del profesor que no solo te ayudaría a ti, sino a todos los demás.

En este caso lo mejor es perder el miedo a equivocarte. Algo que no te enseñan en tantos años de educación formal y que debes aprender por tu cuenta.

Ventajas de participar en clase

Ventajas y beneficios de participar en clase

1. Ser reconocidos por los profesores

Si participas asiduamente en determinada asignatura, es probable que el profesor o la profesora recuerde tu nombre o rostro. Y, además, que asuma que tienes un interés y compromiso especial con la carrera.

Más allá del plus que puede generar la intervención oral en la calificación final del curso, que el docente te reconozca te puede ayudar más allá de la clase en sí.

Por ejemplo, es común que para acceder a determinadas becas o pasantías te soliciten una o más cartas de recomendación de profesores. Por ello, lograr que al menos te identifiquen resulta muy importante.

Puede ocurrir también que, al conocer tu interés y capacidad, te invite a ser ayudante de cátedra o a participar en proyectos u otro tipo de instancias que, sin duda, ampliarán tus horizontes académicos o profesionales.

2. Absorber mejor los conocimientos

Interviniendo ocasionalmente, o estando dispuesto a participar, seguramente sigas con mayor atención el contenido de la clase, dispersándote menos. De esa forma, es probable que a la hora de estudiar para el examen notes que muchos temas requieren tan solo un repaso. O que no te encuentres con mayores dudas y dificultades mientras vas leyendo.

Además, al involucrarte con el desarrollo de la clase y participar de vez en cuando en ella, seguramente la sientas más dinámica o entretenida y su transcurso te resulte más agradable en general.

3. Desarrollar tu capacidad de comunicación

Las participaciones son, después de todo, pequeñas exposiciones. Resultan una instancia interesante para evaluar tu nivel a la hora de desarrollar ideas o cuestionamientos relacionados con la disciplina, práctica que te será útil cuando te toque explayarte en los exámenes y a lo largo de toda tu carrera.

Al tener un profesor como interlocutor, es probable que recibas correcciones o precisiones sobre términos que utilices u observaciones que hagas. Lejos de avergonzarte, debes tomar dichos comentarios como un complemento dentro de tu aprendizaje que te resultará útil tarde o temprano.

Las participaciones en clase no dejan de ser breves exposiciones orales.

Claves para participar en clase de forma adecuada

claves para participar en clase de forma adecuada en la universidad

Hay que recordar que las clases tienen un ritmo y que a veces las intervenciones solo logran entorpecerlo. Esto puede resultar fastidioso para el profesor y para tus compañeros.

Te proponemos evaluar los siguientes aspectos antes de participar:

1. Aprovechar los espacios que el profesor dedica exclusivamente a la participación

Muchos profesores preguntan si hay dudas o proponen que los alumnos comenten en determinado momento. Ese momento puede ser al finalizar la clase o al terminar de dictar un tema. Por lo tanto, si se te brinda ese espacio, lo ideal es esperarlo y aprovecharlo.

Si el docente no otorga explícitamente dicha posibilidad, debes buscar por tu cuenta un momento adecuado. Por ejemplo, cuando el profesor culmine una explicación, cuando sientas seguridad de que tu intervención no confundirá más a tus compañeros o cuando consideres que tu aporte es realmente relevante para la clase.

2. Ser conscientes del tiempo

Muchas veces los profesores van atrasados con el dictado del curso. Esto significa que no pueden permitirse invertir demasiado tiempo en la interacción con los estudiantes.

Si notas que el tiempo apremia, lo ideal es anotar las inquietudes pendientes e intentar solucionarlas en casa con ayuda de los libros. Si eso no te basta, siempre podrás recurrir al docente en otro momento que considere menos inoportuno.

Antes de hacer una intervención, hay que tener presente el momento de la clase.

3. Darle la posibilidad a otros

Si el profesor hace preguntas o invita a comentar cuando tú ya lo has hecho previamente, lo mejor es no insistir.

Hay que dejarle el espacio a otros compañeros que aún no lo han hecho. Algunas personas necesitan más tiempo para decidirse a intervenir que otras.

Resumiendo

En suma, participar y preguntar en clase puede traer más beneficios de los que se cree. Esto es así tanto a mediano como a corto plazo.

Solo basta con dejar la timidez de lado y el miedo a equivocarte. Luego, es importante comprender que tus ideas e inquietudes son tan valiosas para el desarrollo de tu aprendizaje como el contenido que dicta el profesor.

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Acerca del Autor

Anahí Aguirre

Tengo 23 años. Actualmente vivo en Uruguay y estudio Relaciones Internacionales y Corrección de Estilo en la Universidad de la República.

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