¿Qué son y qué tipos de productos de apoyo existen?

En la actualidad existen diversos productos de apoyo, que favorecen la comunicación y el aprendizaje, teniendo en cuenta las necesidades particulares del alumnado. En este artículo te invitamos a conocer qué son los productos de apoyo, cuáles son sus características y las diversas opciones que el mercado nos ofrece.

Productos de apoyo para diferentes circunstancias

Para comenzar, es interesante pensar en la escuela y lo que sucede en el aula. Allí podemos encontrar estudiantes con diferentes características, en relación con: su origen, idioma, raza, cultura, formas de comunicación, diferentes ritmos de aprendizaje, entre otros.

Estos factores, vinculados a la diversidad del alumnado, implican la necesidad de diferentes recursos a la hora de enseñar y de aprender.

Así, en el caso de estudiantes con discapacidad, por ejemplo, existen productos de apoyo que favorecen los procesos de aprendizaje y de comunicación, y cuyo fin es mejorar la calidad de vida y fomentar la participación en todos los ámbitos de su vida.

En el próximo apartado veremos en detalle qué son los productos de apoyo y para qué sirven.

¿Qué son los productos de apoyo y para qué sirven?

Los productos de apoyo (antes denominados «ayudas técnicas») son aquellos materiales, instrumentos o equipos que, justamente, tienen como fin brindar los apoyos necesarios para favorecer la autonomía, mejorar la calidad de vida y la participación de las personas en sus diferentes ámbitos.

Así también, potenciar la funcionalidad en las distintas actividades que el sujeto realiza en su vida cotidiana. Es decir, que, a partir del uso de los mismos, se busca que las personas puedan ser más autónomas y que le permitan eliminar o disminuir las barreras que limitan su participación plena.

Para ser considerados como tal, estos productos deben cumplir con ciertas características, entre ellas: ser necesarios y eficaces, seguros, accesibles, aceptados por el usuario, dinámicos, de calidad, entre otras.

Tipos de productos de apoyo

La elección de los productos de apoyo, se realiza por los profesionales junto a quien será el usuario del mismo. Para ello, se debe evaluar las necesidades, motivaciones y decisiones de la persona. En la actualidad, se define a los productos de apoyo con la utilización de la norma ISO 9999:2012, en la cual se establece su clasificación y terminología.

Así, y si pensamos en su función, los productos de apoyo se pueden clasificar, en:

• Preventivos: Es decir, aquellos que buscan disminuir el riesgo de aparición de una deficiencia o evitar que esta evolucione.
• Facilitadores: Son los que permiten aumentar las posibilidades funcionales.
• Compensadores: Tal como su palabra lo indica, favorecen la realización de tareas que, de otra forma, la persona no podría hacer.

Por su parte, también, se establece una clasificación estructurada en diferentes niveles jerárquicos, siendo estos, clases, subclases y divisiones. Aquí nos encontramos con: los productos de apoyo para el entrenamiento/aprendizaje de habilidades, productos de apoyo para la comunicación y la información, para la movilidad personal, para manipular objetos y dispositivos, productos de apoyo para el esparcimiento, entre otros.

Si bien existen diversos tipos de productos de apoyo, que se utilizan en diferentes ámbitos, nos centraremos en el próximo apartado en aquellos que se utilizan frecuentemente en las escuelas.

Productos de apoyo en las escuelas

En el ámbito escolar, el uso de productos de apoyo se encuentra íntimamente vinculado a la inclusión. Estos posibilitan en muchos casos el acceso a la institución, favorece el aprendizaje de los contenidos y el desarrollo de lazos sociales.

Entre los productos más utilizados, se encuentran los siguientes:

Grips o adaptadores para la escritura

Sirven para facilitar la toma, es decir, el agarre de lapiceras y lápices, a partir de una mejora en la posición de los dedos de la mano. Existen de diferentes materiales, texturas y colores.

Tijeras

Actualmente, hay diversos diseños en el mercado, en función de las diversas necesidades. Frecuentemente, se suelen utilizar, aquellas que tienen una abertura más amplia para colocar más de un dedo y así lograr cortar con mayor facilidad.

Tableros de comunicación

Son dispositivos de estructura rígida o electrónicos, en donde se organizan diferentes símbolos gráficos, pudiendo ser estos: letras, imágenes, pictogramas, etc. A partir de señalar alguno de estos símbolos, es que los y las estudiantes, pueden comunicarse.

Agendas visuales

Similares a los anteriores, en este panel (rígido o semirrígido) se disponen símbolos gráficos, frecuentemente pictogramas. A partir de estos, se organizan las diferentes actividades que se realizarán durante el día. Esto les permite a los usuarios un mayor manejo de la ansiedad a partir de la identificación y anticipación de las actividades.

Libro, cuadernos o estuche con pictogramas

En este caso, los símbolos se distribuyen en diferentes páginas y se suelen utilizar imágenes del usuario, de aquellos que conoce (familiares, docentes y compañeros/as), como así también, los lugares y actividades que frecuentemente realiza.

Funciona como un sistema personalizado de comunicación alternativa, en el cual se van agregando símbolos y vocabulario en función de los nuevos aprendizajes.

Concluyendo

Si pensamos en la diversidad de los y las estudiantes como algo inherente a la escuela en sí misma, tenemos que tener en cuenta, también, que estos individuos tienen necesidades específicas vinculadas a los procesos de aprendizaje que allí se desarrollan.

Así, la creación de productos de apoyo para las personas con discapacidad, busca eliminar o disminuir los obstáculos que estos sujetos se encuentran en sus actividades diarias.

Por su parte, también, busca garantizar el acceso, favorecer la autonomía y la participación, en los diferentes ámbitos de su vida. En el ámbito escolar, principalmente, el uso de los mismos, favorece la comunicación y el aprendizaje, repercutiendo esto en su calidad de vida.